Suplemento Economía

El Capital Humano y la era de los afectos

Por Gustavo Segnini*

Te cuento el final de la película para que nos podamos concentrar en todo el proceso que nos lleva hasta ahí.
Muchas empresas creen todavía en las viejas fórmulas de éxito que la llevaron a ser lo que son hoy. Muchas de ellas exitosas, con muchos bienes materiales, colocaciones financieras, etc.
Tal vez deberían aprender de la triste enseñanza que nos dejó la pandemia: Vimos caer devorados por este virus invisible a simple vista a personas que rebozaban de salud, todos los parámetros vitales excelentes y sin embargo en pocos días nos dejaron.
Esto nos enseña la finitud de nuestras vidas, no hay nada que detenga el destino común a todo ser vivo, pero hay circunstancias extraordinarias que lo cambian todo. Entonces no hay planes.
En las empresas pasa algo parecido, es muy difícil prever situaciones extraordinarias y no existe peor enemigo para los líderes de las empresas que hacen gala del "pensamiento lineal". Siempre hice A, luego B y el resultado fue X. 
Considero que la nueva era post-pandemia será desafiante ya que las personas cambiaron, van a valorar más su tiempo, su salud y la de los suyos. Si me permiten quiero llamar a esta nueva época como "la era de los afectos". 
Sin dudas a fuerza de aislarnos como único método de protección -hasta que llegaron las vacunas- le dimos otra dimensión a la necesidad de estar cerca de nuestros afectos: Familia, amigos, compañeros de alguna actividad común, etc.
Esta era de los afectos va de la mano de la necesidad que las empresas entiendan el cuidado particular y especial que debemos tener con las personas que las conforman.
No solo el salario es un factor determinante (claro que el mismo debe ser digno para vivir) para los integrantes de una empresa, se comenzará a dar una importancia relevante a los afectos:
· El clima laboral. 
· El trato entre las personas y en especial de los jefes con su gente.
· La actitud de escucha. 
· La empatía por los problemas de los otros
· La sensibilidad de estar en los momentos difíciles y compartir también las alegrías.
Insólitamente veo empresas con una estructura que supera las 40 personas sin un área de Recursos Humanos. Hablo de un área liderada por un profesional del tema y no un pasante de ½ día que liquida sueldos y alguna tarea administrativa adicional.
Algunas empresas expresan: “este es un GASTO que no podemos asumir”, sin ver los gastos que van a generar por no tenerlos. Muchas empresas todavía ven como un gasto cualquier intangible y como una inversión a la compra de bienes físicos, en muchos casos, bienes que no se usan o están parados mucho tiempo.
Para entrar en esta nueva era es necesario que barajemos y demos de vuelta en pensar nuestra empresa desde nuestra gente y no desde nuestros productos. Los productos nunca serán de excelencia sin un personal motivado y que tenga el sentido de pertenencia en su más amplio aspecto.
Los líderes deberían crear un clima de COOPETENCIA en lugar tradicional clima de Competencia que genera un desgaste emocional tremendo entre las personas.
El desafío será grande porque no se trata de comprar una máquina para aumentar la producción, se trata de cambiar la cultura de las empresas y en especial de sus líderes. 
Bienvenidos a la "Era de los Afectos". 

* Director general en TRON Software Argentina



Autor: REDACCION

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