La gestión de obras con financiación de los gobiernos provincial y nacional, sumadas a las propias que se encaran desde el municipio, van conformando un escenario promisorio, en especial por la infraestructura que se va consiguiendo para la ciudad, cabecera y eje de esta importante zona productiva del centro-oeste santafesino. Algunas de estas obras se encuentran en ejecución, otras en avanzado estado de proyección con licitaciones en marcha, y otras con fechas concretas en todas las instancias previas.
Con recursos nacionales, continúa avanzando la conversión en autovía de la ruta nacional 34, por ahora en el tramo Angélica-Sunchales, y además con el agregado de la "variante Rafaela" que es nada menos que la circunvalación por el sector oeste de esa carretera; y también con recursos nacionales y aporte de gestión municipal se viene avanzando en la factibilidad de la construcción de un edificio propio para la Universidad Nacional de Rafaela. Y en ese mismo sentido, con financiación nacional, se reactivó el proyecto del Gasoducto Lechero, que cubrirá la provisión de ese fluido a las ciudades de Esperanza, Rafaela y Sunchales, además de aquellas localidades cercana a su traza, estando en desarrollo la licitación para la compra de cañerías y la promesa que la obra estará concluida durante 2018.
Desde la Provincia en tanto se cuenta con la financiación de la obra del desvío del tránsito pesado, muy esperada, lo cual junto a la citada circunvalación por el oeste conformará una especie de anillo para el desvío del tránsito pesado por las calles de la ciudad; además, está en marcha la construcción del nuevo hospital en el sector norte del ejido urbano. Pero lo de mayor trascendencia sin ninguna duda será el momento que comiencen las obras del acueducto, cuya primera etapa consistente en la toma de agua en Desvío Arijón y la llegada a Santo Tomé y Sauce Viejo está realizada, aguardándose la concreción de un préstamo externo para encarar la segunda etapa, cuya traza llegará hasta nuestra ciudad.
De tal manera, lo referido, además de las obras que en forma permanente va generando el municipio, se cuenta con una perspectiva muy positiva e interesante, incluso superadora de la escasez de recursos a veces tan pronunciada.Y llegamos al punto que en realidad queremos enfocar, dada la reciente apertura de sobres de la licitación de cañerías, para el entubado del Canal Norte, una obra sumamente necesaria para la ciudad que viene siendo postergada desde hace largo tiempo. La misma, a cargo de la Provincia, significará una erogación de casi 129 millones de pesos, lo cual habla claramente de la importancia de la realización, la que una vez en funcionamiento llevará una gran alivio a todo el sector norte de la planta urbana, y muy especialmente, contribuirá al saneamiento de todo el sector, en especial aquellos que tienen viviendas ubicadas casi sobre el mismo margen del canal.
Los barrios beneficiados con el entubamiento de unos 800 metros -con cañerías de 6 metros de ancho y 2,80 de altura-, serán Martín Güemes, 9 de Julio, Martín Fierro, Fasoli, Guillermo Lehmann, 30 de Octubre, Alberdi, Villa Dominga, Italia, Barranquitas, Nuestra Señora de Luján, Monseñor Zazpe, Virgen del Rosario y Mora. Como se advierte, nada menos que 14 barrios de la ciudad se verán beneficiados, en la preservación de la salud de los vecinos cercanos a la traza, en seguridad por el tránsito y también en estética.
Todas las mencionadas son obras de gran impacto para nuestra ciudad, pero sin dudas la más esperada y aún en etapa de búsqueda de financiación es el acueducto, que tuvo avance sólo en su primera etapa, estimándose que aún faltarán unos años para su llegada a Rafaela, constituyendo la solución integral para la escasez de agua durante el verano. Se agregan la Autovía 34, el desvío del tránsito pesado, el gasoducto lechero, y ahora se añade el canal norte, una solución integral y amplia para 14 barrios del sector corte de la ciudad. En todos los casos no se trata sólo de promesas y anuncios, sino de iniciativas en marcha, algunas más avanzadas y otras menos, pero que seguramente se convertirán en realidad. Los rafaelinos y la región las esperan.