Mientras la ciudad se prepara para su próxima Muestra Anual de la Sociedad Rural de Rafaela, que será del 7 al 10 de octubre, en la provincia de Santa Fe comenzó la temporada de exposiciones en las que el sector agropecuario, de servicios y también la industria, llegan a los centros urbanos para mostrar el potencial que cada día se desarrolla gracias a la tierra.
San Justo, Venado Tuerto, Reconquista y La Criolla ya tuvieron sus eventos y pudieron reunir a importante cantidad de público, en diferentes puntos de la Provincia, pero también mostrar sus producciones más características, las que hacen de sustento fundamental a cada región.
Sara Gardiol, la presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe (Carsfe), explicó que “en general las muestras en este momento de reencuentro, como lo hicieron en San Justo, permiten un hecho social donde se vinculan el campo y la ciudad, con toda la actividad del comercio y la agroindustria. La gente toma a estas citas como un momento para volver a dialogar, para planificar y también para escuchar buenas conferencias”.
“Hay un buen ambiente en las exposiciones rurales y hay un buen número de participantes”, con lo cual cada cita propuesta por las 30 rurales de todo el territorio provincial podrá ofrecer de manera renovada un vínculo y una oferta particular tanto para el campo, como para las ciudad.
Según la titular de Carsfe, los productores por estos días están “analizando la situación de forma prudente y haciendo su cualificación en función del ciclo agronómico, con muchas dudas sobre cuáles van a ser las definiciones a nivel nacional, porque por ahora hay sólo enunciados, no hay definiciones sobre cómo lograr los objetivos”.
“En virtud de las reuniones que tuvo la Comisión de Enlace, todos los temas desde el punto de vista del Estado van a ser analizados, cuando en realidad son todas cuestiones que se conocen hace tiempo, que se vienen tratando, se vienen reclamando y determinando posturas”.
Es en este contexto de falta de definiciones que los productores tienen que seguir trabajando, produciendo alimentos y planificando cómo enfrentar la próxima campaña gruesa.
Los dirigentes tienen también la oportunidad de acercarse a los productores y es en esos diálogos en los que se pide “previsión, liberación de las exportaciones, eliminación de los cupos sobre todo para la industria frigorífica, para trigo y maíz, la deformación de precios entre la venta de granos y la compra de insumos, pero también sobre la diferencia cambiaria desde que el productor le agrega valor a la tierra, hasta que compra insumos o servicios”.
En ese vínculo, es la dirigencia agropecuaria la que traslada a una entidad como Carsfe la preocupación de promover la participación en las instituciones. “Todos esperan muchas respuestas de las entidades, pero lo que se necesita es tener el apoyo, la colaboración y el acompañamiento de forma diaria”.
La agenda terminará a fines de octubre con la Fiesta del Caballo en San Cristóbal, con un camino que tendrá a la zona centro de la provincia con actividades que van desde exposiciones, a jornadas de capacitación, o remates, donde el motivo comercial y también social queda justificado y con el valor agregado de seguir apostando al campo, en sus diversas producciones.