El auto más rápido del mundo es eléctrico.
Hoy en día, con entrenadores personales y motivadores por doquier, uno de los discursos más populares (aunque no es precisamente nuevo) es que tu verdadero rival no está en los demás, que está en ti mismo y que lo que tienes que hacer es autosuperarte.
Habrá quien lo aplique o quien no, pero en el mundo del motor hay un modelo que lo cumple a cabalidad: el Genovation GXE.
Este bólido, que por fuera parece un Chevrolet Corvette, es en realidad un superdeportivo de cero emisiones que ostenta el récord de ser el coche eléctrico más rápido del mundo.
SU PROPIO RECORD
Sin embargo, no estaba contento con ello, así que ha roto su propio récord otra vez.
Fue el pasado mes de septiembre cuando rompió su marca previa (en 2016 llegó hasta los 330,88 km/h), estableciendo el techo de la velocidad punta para un automóvil eléctrico en los 338,28 km/h.
Poco ha tardado en saltar a la palestra mostrando un nuevo registro, que ahora es de 340,85 km/h.
Lo cierto es que la mejora es muy sutil, tanto como para pensar que el Genovation GXE está llegando al límite de sus capacidades, pero Genovation Cars quiere ir un paso más allá y tiene el objetivo muy claro: convertirlo en el Corvette y el auto más rápido del mundo en toda la historia.
¿Qué implicaría esto? Batir al Corvette ZR1, quien actualmente ostenta el título con una marca de 341,18 km/h. Buscarán el récord el próximo año, ejercicio durante el cual también se han planteado llevarlo hasta las 220 millas por hora, es decir, los 354 km/h. (Fuente: Auto Bild - MSN)