SANA, 5 (AFP-NA). - Estados Unidos cerró ayer la
mayor parte de sus consulados y embajadas en los países árabes -25
en total-, como en el caso de Yemen, donde las medidas de
seguridad fueron reforzadas frente a las representaciones
occidentales tras el aviso emitido por Washington de posibles
atentados de Al Qaida en agosto.
Las embajadas estadounidenses en las monarquías vecinas del
Golfo, entre ellas Arabia Saudita y Kuwait, se encontraban también
cerradas el domingo, al igual que en otros países árabes como
Argelia y Jordania.
Por la tarde el Departamento de Estado anunció que extendía la
medida para algunas de sus legaciones diplomáticas hasta el 10 de
agosto y añadió que un pequeño número adicional de
representaciones también cerrarían sus puertas.
En Ammán, "las medidas de seguridad han sido reforzadas
alrededor de la embajada estadounidense", indicó antes un
responsable jordano, quien añadió "no haber apreciado amenazas"
específicas.
En Saná, las fuerzas de seguridad yemeníes, armadas y apoyadas
por vehículos blindados, estaban en alerta frente a las embajadas
cerradas de Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania, entre
otros países, mientras un drone (avión teleguiado) probablemente
americano sobrevolaba la capital a mitad de jornada, según los
habitantes.
El barrio de Hadda, en el sur de Saná, donde se encuentran la
mayoría de embajadas y residencias diplomáticas, entre ellas las
de Francia, Alemania y Arabia Saudita, estaba controlado por las
fuerzas especiales de la Guardia presidencial.
"Nosotros ya estábamos en estado de alerta pero hemos redoblado
la vigilancia", declaró un policía yemení a la AFP.
El Alto Comité de Seguridad restableció a principios de semana
los controles de carreteras en los alrededores de Saná y en las
rutas que enlazan la capital con las grandes ciudades del país. "Una medida preventiva durante los seis últimos días de
ramadán", período marcado en ocasiones por actos de violencia por
parte de los extremistas, según una fuente de seguridad.
Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania decidieron
cerrar sus embajadas en Saná al menos durante dos días, tras el
anuncio lanzado el jueves por parte de Washington de un alto
riesgo de atentados en el mes de agosto.
"Esto no es indicio de una nueva serie de amenazas sino
meramente un indicio de nuestro compromiso para ejercer la cautela
y tomar los pasos apropiados para proteger a nuestro personal,
incluyendo empleados locales y visitantes a nuestras
instalaciones", dijo la portavoz del Departamento de Estado Jen
Psaki en un comunicado.
Señaló que las legaciones diplomáticas en Abu Dhabi, Ammán, El
Cairo, Riad, Dhahran, Jeddah, Doha, Dubai, Kuwait, Manama, Muscat,
Saná, Trípoli, Antanarivo, Bujumbura, Yibuti, Jartum, Kigali y
Port Louis estarían cerradas desde el lunes hasta el próximo sábado.
Las misiones que reabrirán normalmente el lunes incluyen Dacca,
Argel, Nouakchott, Kabul, Herat, Mazar el Sharif, Bagdad, Basora y
Erbil.
La amenaza de atentados de Al Qaida afectan al conjunto de
intereses occidentales, advirtió el jefe del Estado Mayor de
Estados Unidos, Martin Dempsey. Las amenazas son "más específicas"
pero el objetivo exacto no se conoce.
El sábado, Interpol emitió también una alerta global de
seguridad en la que instaba a los países miembros de esta
organización de cooperación policial a aumentar la vigilancia
frente a la amenaza de Al Qaida, ya que el mes de agosto es el
aniversario de varios "ataques terroristas violentos" en India,
Rusia e Indonesia.
En una grabación que circula en los foros yihadistas desde hace
un mes, el jefe de Al Qaida, Ayman al Zawahiri, acusaba a Estados
Unidos de haber llevado a cabo un "complot" con el ejército
egipcio y con la minoría copta para destituir al presidente
islamista Mohamed Mursi a principios de julio.