El tema de los católicos divorciados que vuelven a contraer matrimonio por civil se va agudizando cada vez más en el mundo, y en la Argentina también.

Diversos episcopados están promoviendo estudios y entregando directivas que ayudan a comprender el problema y, en lo posible, a sugerir soluciones. Entre otros, quisiera destacar el episcopado francés, que en 1992 publicó "Los divorciados vueltos a casar en la comunidad cristiana".

La versión argentina del documento fue publicado por "Criterio " y "Ediciones paulinas". En una nota introductoria, monseñor Osvaldo Santagada, entonces juez del Tribunal Eclesiástico Nacional, reflexionaba lo siguiente:

"Surge por todas partes una duda que carcome:¿podrá ser estable, definitiva y permanente la unión del varón y la mujer?

En un mundo en que casi todo es 'descartable'¿puede haber algo durable para siempre? La desconfianza está destrozando a la gente. Lo sabemos bien quienes hemos preparado durante largos años a los jóvenes para el matrimonio cristiano. Hay dos clases de dudas: sobre la institución  misma del matrimonio y sobre las condiciones personales para asumir el riesgo de un amor estable.

La realidad que vivimos es esta: junto a nosotros, ya no como excepción, viven muchas personas fracasadas, frustradas, desilusionadas por una vida matrimonial que no tuvo significado. Algunas han recurrido al divorcio civil y otras, las menos, tienen motivos serios para iniciar el juicio de nulidad matrimonial ante los tribunales eclesiásticos que les permita volver a quedar libres para contraer nupcias auténticas. Pero casi todos sufren el drama de la soledad que se presenta como la gran amenaza de una sociedad tan 'comunicada' e 'incomunicada' al mismo tiempo. De tales divorciados, algunos han vuelto a unirse civilmente, y algunos han decidido permanecer solos asumiendo su nueva realidad. Unos como otros necesitan la ayuda de la fe de la Iglesia y del amor de los creyentes...".

El documento de los obispos franceses ayuda al acompañamiento de los divorciados vueltos a casar. Es un buen y autorizado aporte, cuya lectura detenida puede beneficiar a todos.