Buenos Aires, Julio de 2024( Por Agencia Vox).- El 20 de julio está a la vuelta de la esquina y con él llega una de las fechas más esperadas del año: el Día del Amigo. Es una ocasión perfecta para reunirse con aquellos que han estado a nuestro lado en diferentes etapas de la vida, desde la infancia hasta la universidad, o incluso los que hemos hecho en el trabajo.

Las escenas que caracterizan el Día del Amigo las conocemos bien: todo deviene en grandes mesas, sumidas en ruidosas conversaciones, rechinar de copas que se levantan para brindar a repetición, y donde la charla para ‘ponerse al día’.

Aunque se diga una y otra vez que, en estos eventos, lo más importante es el contacto humano y la alegría de compartir momentos especiales, la comida es clave. Sobre todo entre los argentinos, para quienes tradicionalmente cualquier excusa es buena para disfrutar comer algo que nos guste y nos haga vivir una experiencia gastronómica memorable.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define los hábitos alimentarios como un conjunto de costumbres que determinan la selección, preparación y consumo de alimentos. Para mantener una buena salud, la OMS recomienda limitar la ingesta de aceites y grasas saturadas, consumir una variedad de alimentos, aumentar el consumo de vegetales, mantenerse bien hidratado, reducir el azúcar y la sal, y evitar el alcohol.

Así, en lugar de optar por las clásicas picadas llenas de alimentos ultra procesados, se pueden elegir opciones saludables que sean igualmente deliciosas y festivas. La clave está en la variedad y en la elección de alimentos que beneficien el bienestar sin dejar de lado el placer de comer. De esta manera, todos pueden disfrutar de la celebración sin sentirse culpables al día siguiente.

Si se planea una reunión en casa, una opción es armar una picada con guacamole (palta, cebolla morada, tomate y limón), hummus (garbanzos hervidos, aceite de oliva, limón y semillas de sésamo), tostadas integrales, nuggets de pollo caseros, y bruschettas de pan integral con queso, berenjena grillada o tomate y albahaca. Para reemplazar la cerveza, se pueden servir aguas saborizadas caseras con rodajas de fruta, menta y jengibre. “En una picada el pan es un alimento clave, y para que sea más saludable se puede sumar panes integrales y de masa madre que permiten una mejor digestión”, advierte Martín de Vit, técnico de Puratos, una empresa food tech belga que desarrolla productos de panadería, pastelería y chocolatería.

Este enfoque saludable para la gastronomía es una tendencia creciente en todo el mundo. Según el informe Taste Tomorrow - el reporte con información cualitativa y cuantitativa que elabora Puratos en base a datos de más de 50 países–, las tendencias alimenticias están cada vez más orientadas hacia la salud y el medio ambiente. En Argentina, por ejemplo, el 78% de los consumidores aumentaría sus compras en panaderías que utilicen exclusivamente ingredientes naturales. Además, el 69% opta por alimentos de origen vegetal, alineándose con la media latinoamericana y superando la media mundial. Estas cifras reflejan un cambio en la conciencia alimentaria, priorizando lo saludable y lo natural.

De acuerdo a Taste Tomorrow, en América Latina el 46% de los consumidores considera los ingredientes naturales como un factor primordial en sus decisiones de compra. Además, el 32% valora los productos que favorecen la buena digestión y la salud intestinal, mientras que el 27% busca un perfil energético equilibrado en sus elecciones alimentarias. Otros aspectos destacables del capítulo de Taste Tomorrow dedicado a la región, son la importancia de los productos ecológicos (21%) y su impacto positivo en el bienestar mental (21%).

Según de Vit, “la tendencia hacia productos más naturales y saludables no es solo una moda pasajera. Los consumidores están cada vez más informados y exigentes. En Argentina, vemos que el 55% cree que el pan de masa madre es más sano, y el 68% está de acuerdo en que las alternativas vegetales pueden ser tan deliciosas como las de origen animal”.

El Día del Amigo es una celebración con historia. En Argentina, se festeja el 20 de julio, fecha que conmemora la llegada del hombre a la Luna en 1969. Enrique Febbraro, un odontólogo argentino, vio en este hito un símbolo de amistad de la humanidad al universo. Envió mil cartas a diferentes ciudades proponiendo la celebración y recibió 700 respuestas favorables. Desde entonces, el 20 de julio se ha convertido en una tradición para celebrar la amistad.

Por supuesto que lo más importante del Día del Amigo es disfrutar de la compañía de los seres queridos. Ya sea que se opte por un restaurante con opciones saludables, o se prepare una comida casera, siempre se puede encontrar un equilibrio entre el disfrute y la salud. La clave está en la variedad y en elegir alimentos que beneficien el bienestar sin dejar de lado el placer de comer. ¡Feliz Día del Amigo!

Receta: Pan de Campo con Masa Madre (Fermentación directa)

Ingredientes:

Harina 000 500 gr

Agua 300 gr

Sal 10 gr

Masa Madre 100 gr

Procedimiento:

Pesar todos los ingredientes y reservar una cucharada de agua.

En un bowl, mezclar la masa madre junto con el agua.

Agregar la harina. Mezclar hasta lograr una masa homogénea, sin rastros de harina seca.

Dejar tapado a temperatura ambiente por una hora. Este paso (autolisis) es importante ya que ayudará a desarrollar el gluten que contendrá luego el gas generado por la masa madre y nos dará un pan más liviano y de mejor la textura.

Pasada esa hora, disolver la sal en la cucharada de agua que teníamos reservada. Agregarla a la masa.

Amasar por unos 5 minutos hasta que quede lisa. Formar un bollo, colocar en el bowl y cubrir con film o alguna lamina plástica.

Dejaremos fermentar esa masa por unas 3 horas aproximadamente, durante ese lapso realizaremos pliegues en la masa cada 30 minutos.

Una vez fermentada la masa, le daremos forma de bollo y colocaremos en el molde para la fermentación final. El molde puede ser un bowl con un lienzo, colocaremos el bollo con el cierre hacia arriba y cubriremos con film.

Dejaremos levar unas dos horas a temperatura ambiente.

Precalentar el horno a 250°C.

Dar vuelta el pan sobre una placa enharinada, cortar la superficie en forma de cruz para que el pan pueda crecer y abra de forma adecuada.

Hornear por 40 minutos, con vapor inicial.