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Desensillar hasta que aclare

EN PERSPECTIVA. Modificar el rumbo laboral en momentos de inflexión como éste "no es una buena idea".
Crédito: FOTO NA

La demanda de trabajo atraviesa el período más bajo de los últimos 15 años, a lo que se suma el cierre de PyMEs, y los consultores laborales, contra sus intereses, recomiendan aferrarse al puesto. Tanto para los trabajadores en relación de dependencia como para los freelancers que pensaba en cambiar de aires laborales, las noticias no son alentadoras.

Desde CoEducation Consulting, que brinda servicios de Recursos Humanos, les salen al cruce. Previenen que modificar el rumbo laboral en momentos de inflexión como éste no es una buena idea, debido a que, por un lado, el cambio de matriz productiva hacia un modelo de importación va a requerir, en lo inmediato, de habilidades nuevas que muchas personas no tienen; por otro, a que con la disminución de la brecha en el tipo de cambio, el cobro en dólares por trabajos en el exterior de manera free lance ya no es tan conveniente como antes. Y finalmente, a que en el mercado laboral free lance también hay inestabilidad y, una vez que se sale del sistema formal de relación de dependencia, puede ser muy difícil volver a ingresar.

Bajar un cambio

Pero antes de ponerse a evaluar las señales a las que hay que prestar atención a la hora de cambiar de trabajo, advierten que "bajar un cambio en la carrera ejecutiva y tomarse un tiempo para reflexionar sería como intentar arrojarse de un tren que va a extrema velocidad y sufrir consecuencias gravísimas".

Por lo que hacen hincapié en que los "trabajadores tienen, entonces, el desafío de aprender a convivir con esa sensación de vértigo constante". Y subrayan que, a pesar del contexto, estos momentos bisagra son una excelente oportunidad para capacitarse, moldear el futuro de la carrera profesional o darle forma a un emprendimiento.

La condición, en cualquier caso, es mantener la calma y no tomar decisiones apresuradas. Aprovechar las oportunidades, si aparecen, o simplemente esperar mejores tiempos, equivale al antiguo dicho de "desensillar hasta que aclare".

Desempleo

El contexto lo enmarcan los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) sobre la tasa de desempleo en Argentina el primer trimestre de 2024, que confirman una suba en la desocupación, que llegó al 7,7%.

Es lo que se ve a diario puertas adentro de las oficinas: el proceso de achicamiento del mercado laboral comenzó, y no sólo en Argentina, sino en toda la región, dado que las empresas redujeron sus planteles

La consultora Michael Page realizó un estudio en el que se señala que el 15% de las empresas encuestadas a nivel nacional planea una disminución de personal de entre un 5% y un 10%.

Por ese y otros motivos, sólo la contratación temporaria o tercerizada emerge como una opción viable en varios sectores industriales para ajustarse ágilmente a las fluctuaciones, asegurar la continuidad operativa y mantener la competitividad.

En este escenario donde las empresas se reestructuran y hay cada vez menos oportunidades ya que se trata del momento de demanda de trabajo más baja de los últimos 15 años, "los colaboradores sienten miedo y sensación de inestabilidad: quiénes trabajan en relación de dependencia tienen temor de perder su trabajo y se sienten amenazados, y quiénes trabajan de manera autónoma, no consiguen nuevas oportunidades", analiza.

Masa laboral a la deriva

Desde la consultora interpretan que “en el país van a quedar menos Pymes y un tema preocupante es hacia dónde va a ir toda esa masa laboral desempleada porque la sensación que tenemos es que luego de romper todo, no hay por detrás un plan para reconstruir".

Temen que "tal vez sean talentos que se vayan al rubro de la importación porque estamos en un escenario en el que no hay profundidad de desarrollo interno sino que se está mirando hacia afuera. Se van a perder capacidades y se van a necesitar otras nuevas para desarrollarse en esa economía de apertura”, agregaron.

Beatriz Arias, directora de CoEducation, lo resume:“Con todas las complicaciones que presenta el mercado laboral, la situación del presente es la única y certera posibilidad y me parece que no hay demasiado, me atrevo a decir nulo, margen para poder realizar un cambio significativo".

No sólo se refiere a la Argentina, sino también a nivel regional, ya que hay cada vez menos empresas, razón por la que "nos encontramos en un período en el que las oportunidades de carrera son muy escasas”, señaló.

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