MADRID, 28 (AFP-NA). - España, sancionada por Standard &
Poors, tenía en el primer trimestre casi un trabajador de cada
cuatro sin empleo, al tiempo que volvía a entrar en recesión, un
sombrío panorama que, según los expertos, se prolongará hasta
2013, alimentado por las medidas de austeridad sin precedentes.
El diario económico Expansión lo resumía con un tono dramático:
"Desde Londres hasta Nueva York, pasando por París, Berlín,
Bruselas y Roma. En todas las principales plazas económicas del
mundo occidental los analistas coinciden en una cosa: España
genera mucha preocupación y pocas esperanzas".
Las cifras de desempleo publicadas el viernes por el Instituto
Nacional de Estadística (INE) no contribuirán a infundir
confianza. A finales de marzo, la cuarta economía de la zona euro
tenía 5,64 millones de personas sin trabajo, un 24,44% de la
población activa, un récord en los países industrializados y más
del doble de la media de la Eurozona, que en enero fue de 10,7%.
El lunes próximo, el INE debe confirmar oficialmente la entrada
de España en recesión, apenas dos años después de haber salido de
ella. El Banco de España ya avanzó esta semana un retroceso del
PIB de 0,4% en el primer trimestre respecto al precedente, en que
la economía se había contraído 0,3%.
El gobierno prevé una contracción de la economía de 1,7% del
PIB en el conjunto de 2012, con los dos primeros trimestres de
crecimiento negativo.
"El año 2012 va a ser muy flojo en cuanto a consumo, a creación
de empleo", afirma Alberto Roldán, analista de la firma de
corretaje Inverseguros.
La propia vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáenz de
Santamaría, reconoció el viernes que "estamos viviendo quizás uno
de los momentos más duros de la economía española".
"El momento es difícil pero si, todos juntos hacemos esfuerzos,
se va a salir de esta crisis", aseguró Saénz de Santamaría en una
rueda de prensa en que el gobierno anunció sus previsiones
económicas para los próximos años.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, prometió una salida
de la recesión en 2013, con un alza del 0,2% del PIB, para
emprender después la senda del crecimiento con un aumento de 1,4%
en 2014 y de 1,8% en 2015.
Más pesimista, la Fundación de Cajas de Ahorro, Funcas, ve
siete trimestres de caída de actividad -incluido el último de
2011- lo que augura una salida de la recesión en el segundo
semestre de 2013.