Si bien la recaudación nacional aceleró su ritmo de crecimiento nominal en diciembre pasado logrando incluso revertir el deterioro en términos reales, corregido por la inflación, registrado en los últimos 10 meses, la mejora no alcanza a compensar el ascendente gasto público, según concluye el Informe Económico Semanal del Banco Ciudad (de Buenos Aires).
En un exhaustivo análisis de los ingresos del Estado nacional, el documento señala que los recursos tributarios totalizaron durante el último mes del año pasado 108.599 millones de pesos, lo que refleja un incremento del 6,6% con respecto a noviembre y 42,8% en comparación con un año atrás. "Este aumento interanual resultó cuatro puntos porcentuales superior al de noviembre (38,4%) y casi siete puntos mayor al acumulado el año pasado (36,2%)", detalló el trabajo de los economistas del Banco Ciudad.
Asimismo, en el reporte se destaca que "este repunte, combinado con la moderación inflacionaria reciente, permitió que la recaudación pueda interrumpir la contracción en términos reales verificada desde el pasado mes de febrero, aumentando un 3,4% interanual descontando los efectos de la inflación". Así, "el año 2014 culminó con una recaudación tributaria récord en términos nominales, quebrando la barrera del billón de pesos, aunque no pudo evitar caer en términos reales".
Para la entidad que depende del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el año pasado la recaudación tributaria sumó 1.169.683 millones de pesos, una cifra que resultó un 36,2% superior a los 858.832 pesos recaudados en 2013. A pesar de esta aparente mejora, a raíz de "la escalada inflacionaria, la recaudación medida en términos reales registró un deterioro del 1,7%, acompañando la contracción de la actividad agregada".
En este escenario, explicaron que "pese al repunte reciente de la recaudación tributaria, la dinámica del gasto público requirió de una fuerte asistencia del Banco Central (BCRA) al Tesoro en el último mes del año, lo cual da cuentas de la magnitud del desequilibrio de las cuentas públicas". En este sentido, sostuvieron que "la emisión de pesos para asistir al Tesoro habría acumulado en 2014 más de 161.500 millones de pesos, marcando un incremento superior al 72% anual, siendo la principal responsable de la expansión monetaria del año, por 85.400 millones de pesos".
Más adelante, el informe acotó que el aumento de la Base Monetaria durante diciembre, por 53.400 millones de pesos, "implicará ahondar los esfuerzos en materia de esterilización si se pretende reducir la cantidad de pesos en circulación, en un contexto de falta de dólares". Por eso los economistas del Ciudad manifestaron que "tal como demostró el BCRA en su última licitación de Letras, a través de la cual absorbió 6.200 millones de pesos, este punto parecería estar en la agenda de las autoridades". Agregaron que "el monto absorbido representa sólo una décima parte de la emisión de diciembre, lo cual representa una muestra del desafío en materia de esterilización que enfrentará el gobierno en 2015 en caso de no acceder a financiamiento externo, con un déficit fiscal que podría superar cómodamente los 6 puntos del Producto".
En tanto, la consultora Ecolatina consideró en su informe sobre "principales desafíos económicos de 2015" que en un año electoral el Gobierno no alcanza con sostener la estabilidad cambiaria lograda y que se deberá además reactivar la economía y el consumo.
"El año que comienza trae retos: elecciones presidenciales, elevados vencimientos de deuda en moneda extranjera, riesgos asociados al default de la deuda pública y un cambio en las condiciones internacionales" con la "caída del precio de los commodities, depreciación de las monedas emergentes, menor crecimiento regional, etc", resaltó el documento difundido el fin de semana.
El equipo de economistas de Ecolatina, encabezados por Marco Lavagna -actual asesor del Frente Renovador- advirtió que "si no se modifican las condiciones económicas el gobierno difícilmente pueda retener el poder". En esta dirección, consignó que "para que la actividad repunte es necesario contar con divisas suficientes para abastecer la demanda interna, ya sea para la importación de insumos como de bienes finales".
Además, precisó que "el gobierno difícilmente pueda repetir la estrategia de 2013, ya que el stock de divisas actual es 12.000 millones de dólares menor al que poseía el BCRA a comienzos de dicho año y las condiciones comerciales y financieras lucen más adversas".
Por último, al encender la alarma sobre el contexto del 2015, el informe asevera que este año hay fuertes vencimientos en moneda extranjera: los pagos netos de deuda pública ascienden a 16.000 millones de dólares mientras se estima que hay 6.000 millones de dólares pendientes de pago a importadores. Para empeorar, se prevé una nueva retracción de las exportaciones originada en la caída del precio internacional de las commodities agrícolas, las menores cantidades vendidas por la pérdida de la competitividad externa y la menor demanda de Brasil.