La escritora Beatriz Sarlo declaró ayer ante la Justicia que el ofrecimiento para que se aplicara la vacuna contra el Covid-19 fue hecha por Soledad Quereilhac, la esposa del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, aunque luego públicamente pidió disculpas por decir que había sido "por abajo de la mesa".

La situación generó el enojo del gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien aseguró que fue una "mentira y una canallada" relacionar a su esposa con algo irregular en la vacunación, y tras la autocrítica de Sarlo advirtió: "El daño ya está hecho".

Sarlo se presentó a declarar como testigo ante la justicia federal en el marco de la investigación por el escándalo del vacunatorio VIP del Hospital Posadas, aunque en su testimonio admitió que no hubo un ofrecimiento oculto.