Editorial

Construcción en baja

Aunque parezca reiterado, pues lo remarcamos cada vez que se conoce el índice de la construcción, lo hacemos en consideración a que esta actividad es la más representativa de todo el conjunto, pues según la marcha de la misma es el verdadero termómetro del resto. Y otra vez, en febrero, la industria de la construcción estuvo en retroceso como había acontecido en enero, aunque con un 5,2% en la comparación interanual, constituyéndose en la cifra más importante desde enero de 2013 cuando había sido de 5,4%.

"Si la construcción anda mal, todo el resto lo acompaña", es una reflexión que suele captarse en prácticamente todos los análisis económicos. Es que se trata de una actividad realmente abarcativa en todo sentido, desde mano de obra profesional, especializada, artesanal y de auxiliares que cubre un amplísimo espectro, ampliándose también a todo el abanico de la comercialización, en la cual se pueden mencionar rubros de productos primarios y elaborados, que van desde el cemento, arena, cal, ladrillos, piedras, hasta hierro, madera, vidrios, pinturas, electricidad y todos los derivados de cada uno de ellos. Además, se añade el sector inmobiliario -en clara retracción desde la imposición del cepo al dólar-, como así también el inversor, ya que cuando hay épocas de cierta bonanza, "justamente el ahorro en ladrillos" en una de las opciones preferidas de la gente que cuenta con esa posibilidad.

Puede advertirse entonces, el amplísimo efecto que tiene la construcción en todo su desarrollo. Los dos primeros meses del año han estado en retroceso, y con el agregado de un índice realmente importante en febrero, lo que sin dudas constituye una perspectiva altamente complicada, en especial en lo que hace al futuro inmediato, ya que según la tendencia que se viene marcando, será muy difícil el poder revertirla en el corto plazo.

Este presente de la construcción marcha a tono con otros indicadores, como la desaceleración de la industria -impactada por la caída del sector automotriz-, el consumo de supermercados y centros comerciales, junto al PBI de enero que estuvo en baja. Todo entonces, da cuenta de un fuerte enfriamiento de la actividad económica, que se hace sentir en todas las áreas.

Como se hace habitualmente desde el INDEC, además de los números relativos al período, el informe fue acompañado por las expectativas de los empresarios del sector, las que tampoco resultan favorables. Entre los que intervienen en el sector público el 64,4% estimó que el nivel de actividad se mantendrá sin cambios -debiéndose tener presente que está en fuerte descenso-, mientras que el 20% fue aún más allá considerando que habrá disminución, para finalmente el 15,6% restante mostrarse optimista en cuando que supone que habrá un aumento de actividad.

En cuanto a los que incursionan en la construcción pero en el sector privado, el 60% dijo que no espera cambios, el 24% proyectó que estará en baja y el 16% que habrá incremento.

Debido a esta desaceleración del sector, los permisos de construcción en los 42 municipios más importantes del país, registraron una caída de 2,1% respecto al mes de enero, aunque comparados un año atrás aumentaron 9%. 

Pasando a la comercialización de insumos, también estuvo en descenso, con caídas encabezadas por el 19,4% en asfalto, 14,4% en pinturas, 10,5% en ladrillos huecos  y 3,1% en cemento. En cambio verificaron subas 34,9% los pisos y revestimientos cerámicos y 12,1% en hierro redondo para hormigón.

Todo este panorama registra el promedio nacional, dentro del cual se encuentra por supuesto lo que ocurre en nuestra ciudad, la cual no es ajena a esta situación, y aún cuando no existen estadísticas que puedan cuantificar porcentajes, de acuerdo con algunas fuentes consultadas, la caída también se siente aquí, tanto en el sector público como el privado, que impactados por la devaluación, la fuerte inflación y el resguardo que hacen los inversionistas, han tenido bajas sensibles, que tal vez sin llegar a equipararse con el promedio nacional, pero que se advierten fácilmente dentro de la actividad en general.

Cuando se conozca el relevamiento de marzo será un dato clave para tratar de dilucidar hacia dónde se dirige la actividad en lo inmediato, ya que podría completarse un primer trimestre en estado recesivo.

Autor: REDACCION

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