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Con pincel o rodillo en mano, los pintores celebrarán hoy su Día en la Argentina

"Pintar, lo que se dice pintar una pared, la pinta cualquiera. Ahora pintar bien una pared, no la pinta cualquiera. Hay que saber, papá. Hay que tener experiencia, que palabras más palabras menos significa que ya te equivocaste y si fuiste inteligente aprendiste de esos errores, y también desarrollar una habilidad para hacer simple algo que a otros les cuesta mucho más".
"Hay un montón de factores a tener en cuenta a la hora de tomar un trabajo de pintura de obra. Claro, las necesidades del cliente y las características del trabajo, si se trata de pintar una casa o un comercio nuevo, una escuela o bien recuperar una vivienda que muestra una cierta falta de mantenimiento. Renegar con paredes maltratadas es todo un tema, hay que tener santa paciencia con la lija, aguantarse el polvillo y después tapar con prolijidad las ranuras, fisuras, agujeros, rajaduras". 
"Después está la cuestión de elegir la pintura, el color, los tonos. Nunca es una tarea fácil. Hay que ser consejeros para con determinados clientes. Que lo que el dueño o la dueña de la casa o del comercio se imagina después realmente se plasme en la pared real y así se cumplan las expectativas que tiene antes de pintar. A veces miran cuando se está dando la primera mano y se muestran decepcionados al punto de querer que te vayas. Pero hay que explicar que el resultado final será mejor de lo que están viendo. Con la segunda mano ya cambia el estado de ánimo, mejora y las cosas fluyen. Todos contentos". 
"Y si, a un pintor en la calle se lo identifica enseguida por la ropa de múltiples colores. Gotitas de un color, de dos, de tres, de cuatro y así quedamos hecho un arco iris. Tampoco nos vamos a cambiar de ropa todo el tiempo, sabemos que se arruina con el trabajo y así nos mostramos. A veces cuando volvemos a casa nos retan porque estamos llenos de manchas, que le vamos a hacer, es el daño colateral del oficio".
"Pintar paredes exteriores en altura es todo un desafío. Hace muchos años todo se hacía de otra manera, aunque con mayores riesgos. Quizás a veces no teníamos conciencia de que podíamos caernos de una escalera y sufrir lesiones serias o incluso subir al cielo donde está Dios. Con la llegada de las aseguradoras de riesgos de trabajo, todos entendimos que para nuestra salud es mejor prepararnos y cuidarnos para poder cumplir con nuestra labor reduciendo al mínimo todos los riesgos. Se trata de llegar al trabajo sano y retirarnos del mismo de la misma manera". 
"Hay que tener pincel, pincel redondo, rodillo, alargador extensible para rodillo, lija fina y gruesa, espátula, bandeja, cinta de enmascarar, lona de protección y escaleras de distintos tamaños para empezar a trabajar. Y un buen jabón en lo posible porque la pintura se pega a la piel y hay que lavarse con paciencia". 
"Cuando empecé a pintar, hace ya tres décadas más IVA, el trabajo era más simple porque no había demasiadas clases de pintura. Exterior o interior como grandes ejes. También el tipo de superficie, obvio. Pero ahora las cosas cambiaron totalmente. Ahora hay mil clases de superficies, y pinturas de todo tipo. La investigación y el desarrollo en el negocio de las pinturas derivó en que exista una gran diversidad de pinturas. Entonces nosotros los pintores, al igual que los médicos o los contadores (se ríe), también nos tenemos que poner al día sobre las novedades, las actualizaciones y la mar en coche. ¡Tenemos que estudiar! Saber las características de tal o cual pintura de esta marca y de la otra. Acá trabajamos en forma cercana con las pinturerías, digamos que somos equipo porque todos estamos interesados en hacer bien nuestro trabajo y que el cliente quede conforme, nos llame otra vez o nos recomiende". 
"Sí, la septiembre es el mes de las flores y de los pajaritos como decía un viejo humorista, es la Primavera en realidad y lo que representa, el amor y todo eso. Pero también, creemos nosotros, es la estación de los pintores porque a todos les llega el apuro de pintar rápido antes de las fiestas de fin de año y del verano. El otoño y el invierno con sus neblinas típicas y su alta humedad son tiempos de menor demanda laboral. Pero ahora arranca con todo la temporada alta para pintar. El problema es que no podemos tener tantos dobles como Luis Miguel aunque necesitaríamos para dar respuesta a todos los interesados. Tomamos un trabajo, dos, tres, presentamos mil presupuestos y hacemos lista de espera. Está empezando el mejor tiempo para pintar así que nosotros nos ponemos manos a la obra, como decía Bob el constructor (vuelve a reírse)". 
"Y sí, hay trabajos que podemos hacer con el soplete y el compresor. Ganamos velocidad por lo que es una buena opción para cumplir más rápido con la tarea. Siempre hay que tener cuidados especiales, hay secretitos o tips para aumentar las chances de que todo funcione bien, sin problemas". 
"Al terminar la tarea cada día hay que poner especial atención al lavado de todas las herramientas, como el soplete o la pistola que usamos, el pincel y el rodillo para poder extender su vida útil. Ningún cliente está dispuesto a pagar más útiles de pintor porque descuidemos la higiene. Tenemos que ayudar a cuidar la economía del cliente, eso también forma parte del buen servicio que debemos dar". 

DÍA DEL PINTOR
Hasta aquí todo el desarrollo de consideraciones que un grupo de pintores de obra de Rafaela compartieron de su profesión y de sus vivencias cotidianas. ¿Por qué? Porque hoy se celebra en la Argentina el Día del Pintor, un oficio del color y de las formas que pueden cambiar hogares y oficinas y con ello el estado de ánimo de las personas. 
En los últimos años en Rafaela se registró un crecimiento en la cantidad de pinturerías. Y detrás de cada negocio de este rubro hay decenas de pintores. 
Un pintor, un entendido de la pintura y de las superficies, siempre es necesario a la hora de remodelar o cambiar desde un edificio o un pequeño espacio. No es un trabajo para nada sencillo el del pintor, ya que no solamente se trata de saber utilizar un pincel y una lata de pintura, desparramar y listo, sino que uno debe comprender y llevar a cabo el proceso entero y lograr que quede prolijo y bonito.
Para llevar a cabo el trabajo de un profesional en el Día del Pintor uno debe coordinar las distintas etapas y poder terminar con un buen resultado, ya que al fin y al cabo, este le da el toque final a una habitación o edificio.
Los expertos tienen que rasquetear la pintura antigua, con cuidado de no estropear la base preexistente, lijar y limpiar el cimiento para que quede perfecto. Quizás es la instancia menos adorable del trabajo. Además, deben tener el conocimiento adecuado respecto a las brochas, rodillos o maquinaria que se debe utilizar.
Muchas veces menospreciado o “ninguneado” por la sociedad, ya que muchos sostienen que es un trabajo simple de realizar, el Día del Pintor busca homenajear a todos estos conocedores y técnicos de los colores que logran convertir una habitación aburrida o “sucia” en una completamente nueva.

REQUISITOS QUE DEBE 
REUNIR UN BUEN PINTOR
Como en cualquier sector de actividad, el mundo de la pintura reúne a profesionales con experiencia, conocimientos y predisposición… y otros que no le ofrecerán todas estas garantías. Sin embargo, el resultado en la ejecución de la obra diferirá enormemente entre un profesional experimentado y otro que no lo es tanto. Por esta razón, conviene aprender a diferenciarlos. Cuatro criterios a tener en cuenta en su elección:
-Un buen pintor profesional querrá asegurarse de que su trabajo esté bien hecho por lo que visitará el lugar por pintar. Solo así podrá hacerse una idea concreta de lo que quiere el cliente, del tiempo necesario, de las medidas de seguridad que deberá tomar y de las posibles dificultades con las que se encontrará a la hora de realizar la tarea. No cabe duda que se encontrará ante un buen profesional si quiere observar por el mismo el lugar por reformar.
-Un buen profesional de la pintura entrega un presupuesto detallado y por escrito. Está consciente de que se trata de un servicio profesional por lo que detallará cada aspecto de la obra: productos, materiales o incluso los pasos que seguirá. Cuánto más detallado está el presupuesto, más señales le dará sobre el valor que pone a su propio trabajo.
-Evidentemente, preguntar por la experiencia del pintor. Como bien sabe, la práctica hace al maestro. Este dicho es particularmente relevante en los trabajos de aplicación de pintura. Averigüe si ya ha realizado el tipo de obra que le está solicitando. Además, un pintor experimentado sabrá anticipar las posibles incidencias y ofrecerle soluciones ante cualquier tipo de dificultad.
-Un profesional está dado de alta en la Seguridad Social. Lamentablemente, muchas personas de este sector trabajan sin cumplir con sus obligaciones fiscales. Puede que suponga un ahorro en el costo de la obra. Pero piénselo bien: sin estar declarado, no podrá reclamar si el trabajo no está hecho correctamente.

Feliz Día a todos los Pintores de obra. Y colorín colorado esta nota se ha acabado. 


Autor: REDACCION

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