Un hombre de 62 años de edad, afincado en la calle Baliño al 1400, ante autoridad de la Subcomisaría 1ª denunció un hecho delictivo.
Según su relato, su hijo había ido a buscar tres potrancas y cinco potrillos, que se hallaban en un campo sito en un tramo de la calle J.V. González, y cuando llegó observó que exhibían heridas causadas por impactos de perdigones.
Seguidamente, agregó que no resultaba la primera vez que comprobaba dicha situación, y que en una ocasión había visto que el hijo del dueño del predio -a quien identificó por su apellido-, le disparaba a sus caballos, desde un vehículo Renault Kangoo.
En consecuencia, se llevó a cabo una requisa en una finca ubicada en el predio de referencia, y se procedió al secuestro de una escopeta antigua, calibre 16.
Además, Eduardo R. fue notificado del inicio de una causa penal, por tenencia indebida de arma de fuego.