Nuestro entrevistado sigue hablando con la tonada provinciana. Pausado y reflexivo en su carácter social. Su charla es una sucesión de episodios que van enhebrando cada momento de su historia personal. Conoció el dolor del obraje chaqueño, la aventura de partir un día, la consagración del público y el cariño de la gente que lo sigue reconociendo en lo cotidiano. Su voz, épico relato de grandes hitos del cancionero popular, se mantiene vigente con el mensaje que una vez tomó para entregar en cada interpretación. Su nombre -Carlos Pino- es sinónimo de quebracho y de río, de jornal y de tierra, su presencia tiene el ímpetu del que trae la buena nueva, su relato es el que supo construir a partir de su sensibilidad.

Raúl Alberto Vigini

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