Suplemento Economía

Comienzan a medir las fortalezas y debilidades de la industria rafaelina

Rafaela comenzará mañana a sacar una nueva radiografía a su sólido sector industrial cuando 30 jóvenes estudiantes de educación superior inicien la visita a las empresas para capturar una amplio abanico de información, desde la cantidad de empleados, pasando por el nivel de facturación hasta cuestiones ligadas a la imagen corporativa. Se trata del Censo Industrial 2013, y tercer relevamiento a fondo del sector después de los realizados en el 2000 y 2006, por lo que una vez que se procesen los datos se podrá avanzar en una comparación para medir cómo han evolucionado las firmas industriales de la ciudad.

Es el Instituto de Capacitación y Estudios para el Desarrollo Local (ICEDeL) el encargado de llevar adelante esta "auditoría" que guardará los datos suministrados por el entramado industrial bajo siete llaves, ya que se garantiza máxima confidencialidad. Para aumentar el valor de la información que se colecte a través de dos formularios, el Instituto Provincial de Estadísticas y Censos (IPEC) oficializó este tercer censo.

Hace dos semanas el intendente, Luis Castellano, el director del ICEDeL, Héctor Sierra y el titular del IPEC, Jorge Moore, hicieron la presentación oficial ante un auditorio dominado por los censistas y el equipo de trabajo que se encargará de cargar los datos al sistema utilizado para ordenar el alto volumen de indicadores.

"El Censo Industrial es parte de la política de Estado que nos permite planificar con bases ciertas. Porque si no conocemos lo que está pasando con números, si no conocemos lo que necesitan nuestras empresas hoy, si no conocemos la evolución que va teniendo cada una de ellas en su posibilidad de venta hacia el mercado externo e interno y su crecimiento, ¿cómo podemos pensar el futuro?", destacó Castellano durante la presentación efectuada en el Salón Verde del Municipio.

Tanto el Intendente como Sierra coincidieron en destacar que Rafaela es una de las pocas ciudades de su tamaño que construye información de este tipo en el país y en Latinoamérica. "Por eso constituye una experiencia distinta en términos de planificación estratégica y de integración entre lo público y lo privado que nos posiciona como referentes tanto a nivel nacional como continental", subrayaron.

"Rafaela es una ciudad industrial y no una ciudad con industrias", resaltó Castellano al definir el perfil que tiene y que la ha transformado en un caso de estudio en las universidades o centros de investigación latinoamericanos en los que se pone el foco en el desarrollo territorial. Prueba de esta aptitud de la ciudad, hace dos años se puso en marcha en la UTN Facultad Regional Rafaela una Maestría en Desarrollo Territorial, una apuesta para profundizar la mirada sobre el amplio abanico de temas ligados a cómo crece una ciudad o una región.

Las empresas deberán dedicar cierto esfuerzo en volcar los datos en los formularios que fueron elaborados a lo largo del año pasado en forma conjunta entre el ICEDeL, el Centro Comercial e Industrial junto a los organismos vinculados a las áreas de la educación y la producción que funcionan en la ciudad.

El Formulario A tiene 87 consultas, entre las que se destaca el pedido para que la empresa efectúe una especie de análisis FODA, es decir que describa cuáles cree que son sus fortalezas y cuáles sus debilidades. Además comprende la infraestructura con que cuenta la industria y la utilización de los servicios financieros, entre otros puntos.

En el Formulario B, en tanto, se busca una gran cantidad de datos vinculados a la gestión de los recursos humanos: cantidad de empleados, si están definidas las competencias por puestos, si se llevan adelante programas de capacitación e inclusive cuántos profesionales se desempeñan en cada organización.

Entre los datos que arrojó la comparación de los censos de 2000 y 2006 en materia de ocupación, se destaca que la industria pasó de ocupar 6.274 personas a 7.798 personas, lo que representa un aumento de 24 por ciento. En este sentido, hay que puntualizar que a partir de 2003 la economía argentina comenzó una etapa de recuperación con tasas de crecimiento del 8 por ciento anual en promedio.

" La reactivación económica, con los consecuentes aumentos en la producción de las firmas, provocó una importante disminución de la capacidad industrial ociosa", sostuvo uno de los tramos del Censo Industrial 2006 al considerar la coyuntura favorable de la economía nacional.

Autor: Redacción

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