Policiales

Carl Eugene "Coral" Watts: mató a más de 100 mujeres en los Estados Unidos

BUENOS AIRES, 9 (Por Gastón Marote, especial para NA). - Carl Eugene Watts, conocido como "Coral", fue un asesino serial del cual se sospecha que mató a más de 100 mujeres y se convirtió en el homicida más prolífico de los
Estados Unidos.
Nacido el 7 de noviembre de 1953 en Killen, Texas, Watts tenía como padre a un soldado de primera clase en el Ejército y como madre a una maestra de arte en un jardín de infantes.
Este hombre fue criado por su progenitora desde los 2 años, cuando el matrimonio decidió separarse. La madre se casó con un mecánico y tuvo otras dos hijas. Aunque lo que llamaba la atención en "Coral" era descrito como un ser extraño.
Watts reveló ya en la cárcel, que a los 12 años fue cuando comenzó a fantasear con torturar y asesinar chicas y mujeres jóvenes. Durante su adolescencia comenzó a acosar chicas y hasta se estima que antes de cumplir 15 años mató a su primera víctima. Antes de esto, a partir de los 13 años comenzó a tener dificultad en la escuela -venía de recuperarse de una meningitis- tanto en el aprendizaje como en el vínculo con otros niños, ya que sufría bullying en forma constante.
De acuerdo a una evaluación psiquiátrica, se reveló que sufría un retraso mental leve, con una escala de Coeficiente Intelectual (CI) de 68, y de tener un proceso de pensamiento delirante, aunque un policía interrogó después a Watts y dijo que era "muy, muy inteligente" con una "memoria excelente.

CARRERA CRIMINAL
La carrera criminal -en relación a aquellos en los cuales había certezas- de este sujeto arrancó a los 20 años, cuando secuestraba a sus víctimas de sus casas, las torturaba y luego las asesinaba.
El 30 de octubre de 1974 torturó y mató a Gloria Steele de 20 años, que se cree fue su segunda víctima. Watts, que era afroamericano, casi siempre asesinaba a mujeres blancas y jóvenes de entre 14 y 44 años, con métodos como estrangulación, puñaladas, y por ahogamiento.
Entre 1974 y 1982 mató a docenas de mujeres, pero sería descubierto como autor de esos crímenes muchos años después. La dificultad de poder descubrirlo se basaba en que atacó en diferentes estados, al tiempo que raramente realizaba actos sexuales con sus víctimas, por lo tanto sus homicidios no eran pensados por una motivación sexual.
Los fiscales en Texas sentían que no había suficiente evidencia para condenar a este asesino serial por asesinato, así que en 1982 se organizó un acuerdo con el fiscal. El pacto era que Watts diera detalles y confesiones de sus crímenes y a cambio le darían inmunidad de los cargos de asesinato y él podría enfrentar sólo un cargo de robo con intento de homicidio. Esta calificación está penada con 60 años de prisión.
El detenido estuvo de acuerdo con el trato y rápidamente confesó en detalle 12 asesinatos en Texas. Sin embargo, las autoridades de Michigan se negaron al trato así que los casos en ese estado se mantuvieron abiertos.
Watts luego confesó que asesinó a 40 mujeres, pero también dio a entender que había más de 80 víctimas en total, aunque no lo reveló en forma abierta porque no quería ser visto como un "asesino serial".
La Policía, además de esos homicidios, cree hasta la actualidad que este sujeto es sospechoso en otros 90 crímenes sin resolver.
El 21 de septiembre de 2007, a los 53 años, Watts murió como consecuencia de cáncer de próstata, mientras cumplía dos penas de cadena perpetua en una cárcel de Michigan por los asesinatos de Helen Dutcher y de Steele.

Autor: REDACCION

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