Suplemento Economía

Branding: concepto y construcción de marca

La construcción de una marca no sólo significa elegir un nombre recordable, armar un logo bonito y escribir un slogan pegadizo. El trabajo anterior de análisis, desarrollo, investigación y finalmente toma de decisiones es mucho más complejo, tanto como el mantenimiento y la consolidación de esa imagen lograda una vez lanzada la marca. De esto hablamos cuando se utiliza el término Branding, es la gestión que hace posible la construcción de una marca.

Como consumidores sólo vemos la parte final de este montaje de una marca, o si se quiere, estamos inmersos sin darnos cuenta en el concepto que se armó para nosotros. La segmentación de mercado (elección y diagramación del público objetivo) también forma parte de la construcción, de hecho es una de las primeras cosas a determinar a la hora de armar el concepto principal.

El branding debe ser planteado en un lugar de importancia dentro de las estrategias de marketing y comunicación, ya que no sólo se lleva a la práctica cuando se crea la marca, sino además cuando esta se ubica dentro del mercado, pues necesita un mantenimiento y actualización constante. No olvidemos que lo principal para una marca es diferenciarse no sólo en cuanto a imagen visual, sino además en productos, beneficios, calidad, concepto, presencia, interés e innumerables condiciones más, para que esta pueda competir posicionándose en el primer lugar en la mente de los consumidores.

La dirección de nuestra marca depende de la conformación del segmento de mercado al que se dirige, el público objetivo. Conocer los gustos, situaciones culturales, económicas e incluso políticas dependiendo del producto a comercializar, es de suma relevancia para saber dónde se dirige el proyecto. Un interesante segmento de mercado lo constituyen los adolescentes, donde el consumo ronda las nuevas tendencias y modas permanentes, y por supuesto muy cambiantes que se presentan todo el tiempo. Hay varias marcas que lograron introducirse en este target generando en muchos casos una pasión por el uso de las mismas.

Por eso cuando pensamos en el armado de una imagen de marca es importantísima la investigación del mercado, las tendencias, los competidores directos, potenciales y aquellos que ofrecen productos diferentes pero que desarrollan acciones dentro del mismo segmento de mercado.

Para lograr la atención por parte de los consumidores, es necesario el desarrollo creativo de todo este proceso. No sólo se diagramará el logo y se elegirán los mejores colores para persuadir, sino que además se crearán piezas publicitarias, materiales para el punto de venta, packaging, web, diseño del producto, entre muchos más elementos de comunicación, capacitación, logística y exhibición que harán posible una cobertura a 360° del producto, logrando llegar de esta manera por todos los frentes a los consumidores.

Dentro de la organización debe existir un conocimiento de la marca en todas las áreas para que estas puedan asistir y apoyar a todo el proceso y su posterior ejecución. Es clave la conciencia de este aspecto para que todo se oriente hacia un mismo foco de ejecución. Por ejemplo, las entregas de mercadería a tiempo, el control de los clientes, las compras, manejos de stock, investigaciones y desarrollo de los productos, entre otras acciones de los departamentos de la empresa, hacen a la constitución general de la marca, ya que permiten que el producto llegue como corresponde al consumidor.

Así, una vez que la marca es lanzada al mercado, la presencia y el reconocimiento de la misma por parte de los consumidores es el objetivo principal a cumplir. Y esto se logra a partir de un concepto claro de lo que se quiere comunicar y una cadena interminable de acciones en los puntos de venta, en los medios y en todo el entorno del público objetivo.

Pero, obviamente la comunicación y el marketing no son todo, las acciones en general de una empresa hacen a la construcción de una marca. Todos los esfuerzos de la misma hacen posible llegar al posicionamiento deseado y de esta forma, lograr que los consumidores la elijan, recuerden y hasta a veces se fanaticen con ella.

Autor: Evelin Olivero

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