Automotores

BMW comparte un emotivo cortometraje

La marca BMW comparte un emotivo mensaje de fin de año a través de un cortometraje que unirá a las distintas generaciones de sus seguidores. El cortometraje “Freude (Alegría) para siempre” transmite un emotivo mensaje de cómo en el pasado, en el presente y en el futuro: una licencia de manejo representa mucho más que un simple “plástico” para manejar un vehículo y se vuelve un elemento clave para innumerables experiencias, recuerdos y momentos que forman el carácter. E incluso cuando inevitablemente llegue el día en que ya no puedas manejar responsablemente un vehículo en una vía pública y tomes la decisión de renunciar a tu permiso, una cosa perdurará: “el placer de conducir que une a las generaciones”. Este es el mensaje detrás de un cortometraje que tocará el alma de los seguidores de BMW, sin importar a la generación a la que pertenezcan.
El cortometraje cuenta la historia de una familia en Alemania: Robert, de 85 años, quien se da cuenta de que es hora de dejar los guantes de conducir. Las emociones que esto suscita no sólo las siente él, sino también su hijo Christopher, quien lo acompaña a entregar su licencia en las oficinas correspondientes. El viaje de regreso en el BMW i4 totalmente eléctrico de Christopher se convierte en un viaje a través del pasado y el presente, y en una experiencia muy especial llena de felices recuerdos juntos.
El escenario de la escena inicial del cortometraje de 90 segundos es una sala de espera fría y gris, el monótono tictac de un reloj de pared. Sólo un árbol de Navidad al fondo intenta añadir un poco de calidez. La mirada abatida en el rostro de Robert te dice que ha llegado el momento. Christopher intenta en vano animarlo (“Es sólo un ‘plástico’, ¿sabes?”). Pero para Robert, el trozo de plástico que entrega en el mostrador es una expresión de libertad y del puro placer de conducir. El ambiente en el BMW de camino a casa es adecuadamente melancólico, hasta que de repente Christopher se sale de la carretera.Los dos hombres se detienen ante las puertas de un lugar inicialmente desconocido. A la señal de Christopher, un guardia de seguridad abre la barrera. Resulta que ahora están en el aparcamiento de su empresa. Robert recuerda inmediatamente el lugar donde le enseñó a conducir a su hijo hace casi 40 años. Y en una inversión de roles, Christopher invita a su padre a tomar el volante de su BMW por última vez.Ahora hay un flashback a la década de 1980, cuando Robert intercambia lugares con Christopher para que su hijo, que entonces tenía 18 años, pueda tomar los controles de su BMW Serie 3. De vuelta al aquí y ahora, cuando Robert pisa el acelerador del BMW i4 y el gran coupé totalmente eléctrico entra en acción dinámicamente, el pasado y el presente se fusionan en un espectáculo visualmente impresionante. En su mente se reproducen los alegres recuerdos de los viajes en el BMW con su hijo: el joven Christopher profundamente dormido en viajes nocturnos, vacaciones familiares inolvidables, todos esos kilómetros por el país para animar sus hazañas deportivas, recogerlo en fiestas y conducir él a su primera cita. En un clímax dramático, Robert detiene el auto y hace una pausa por un momento: ahora está listo para dejar el asiento del conductor para siempre. Después de todo, el sentimiento de alegría perdurará para siempre.
La idea de este cortometraje surgió de la agencia creativa y publicitaria Jung von Matt para THE GAME. Producida en colaboración con el equipo de Mercadotecnia de la marca BMW en Múnich, la película dura alrededor de 90 segundos y estará disponible para verla en los canales oficiales de la marca BMW YouTube e Instagram.

Autor: REDACCION

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web