KIEV Y LUGANSK, UCRANIA, 15 (AFP-NA). - El presidente ucraniano,
Petro Poroshenko, prometió una "respuesta adecuada" contra los
separatistas prorrusos que causaron 49 muertos al derribar un
avión militar en el este de Ucrania, donde la esperanza de una
solución al conflicto parece alejarse.
Este ataque, el más mortífero desde que Kiev lanzó hace dos
meses una operación "antiterrorista" en el este separatista, se
produjo poco antes de una esperada reunión el sábado entre Moscú y
Kiev ante el inminente corte del suministro de gas a Ucrania, que
podría afectar a Europa.
"Los que están implicados en este acto terrorista de semejante
envergadura serán castigados", indicó en un comunicado Poroshenko,
quien declaró un día de luto nacional.
Un comandante rebelde, que mostró restos carbonizados del avión
IL-76, dijo que cinco rebeldes abatieron el avión con una
ametralladora y que la aeronave se estrelló en su segundo intento
de aterrizaje.
Un portavoz de los insurgentes en Lugansk, una ciudad de
500.000 habitantes cerca de la frontera con Rusia, había
reivindicado poco antes el ataque producido "en la zona del
aeropuerto", según la agencia Ria Novosti.
Las imágenes de una cámara de vigilancia del aeropuerto
muestran un destello en el cielo en el momento que el avión es
alcanzado.
Unos 30 segundos después se produce una gran explosión
cuando el avión se precipita contra el aeropuerto.
Un portavoz militar ucraniano, Vladislav Selezniov, dijo a la
AFP que todas las personas que iban a bordo del avión militar, en
total nueve miembros de la tripulación y 40 paracaidistas,
fallecieron en el ataque producido a las 01H00 locales (22H00 GMT).
"Los terroristas dispararon cínicamente y a traición con una
ametralladora de gran calibre y alcanzaron el avión IL-76 del
ejército ucraniano que transportaba tropas de relevo y estaba a
punto de aterrizar en el aeropuerto de Lugansk", indicó el
ministerio ucraniano de Defensa.
A modo de reacción, en Kiev, unos 300 manifestantes ucranianos lanzaron huevos
contra la embajada de Rusia y descolgaron la bandera rusa, al
tiempo que dañaron siete vehículos dotados con matrículas
diplomáticas.
Otros 5 soldados de la Guardia Fronteriza ucraniana murieron ayer en la ciudad de Mariupol, en el sur de la región de Donetsk, después de que la columna de vehículos militares en la que circulaban fuera alcanzada por fuego de mortero de los rebeldes, por lo que las bajas de Ucrania llegaron a 54 este sábado.
PREOCUPACION
EUROPEA
Tras el ataque de los separatistas prorrusos, el presidente
francés, François Hollande, y la jefa del gobierno alemán, Angela
Merkel, expresaron su "grave preocupación" ante "los persistentes
combates en Ucrania" en una conversación telefónica con el
presidente ruso, Vladimir Putin.
Ambos líderes abogaron por alcanzar "rápidamente un alto el
fuego" y recordaron la reunión entre Poroshenko y Putin la semana
pasada en Francia para intentar atajar este conflicto que ha
dejado ya más de 300 muertos desde abril.
El Consejo de Europa reiteró el sábado su apoyo al presidente
ucraniano y mostró también su preocupación por el ataque contra el
avión ucraniano.
Kiev y los países occidentales acusan a Moscú de estar
suministrando armas a la insurrección armada en Ucrania.
Según un comunicado de la presidencia francesa, Merkel y
Hollande mostraron su preocupación por "la transferencia de
combatientes y armas a través de la frontera" entre Rusia y
Ucrania en apoyo de los separatistas.
El ejército de Estados Unidos afirmó el viernes que Rusia había
suministrado tanques y lanzacohetes a los insurgentes prorrusos en
el este de Ucrania a través de la frontera común.