Ya se conoce que la cosecha de soja, cuando esté recolectado el 99% de la superficie sembrada, estará en el orden de 57,5 millones de toneladas, con un rinde promedio nacional de 31,9 quintales por hectárea, cantidad en la cual tiene el departamento Castellanos una participación de 904.270 toneladas, producto de la cosecha de primera que ascendió a 760.350 toneladas con un rinde de 37 quintales y la siembra de segunda con 143.920 toneladas y rinde de 28 quintales por hectárea.
El informe de la perspectiva nacional corresponde a datos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, dando cuenta además que el total de la soja estará 2,7% por encima de la campaña anterior, aun cuando hubo un 4,5% menos de superficie sembrada, lo cual da cuenta de los buenos rindes obtenidos, con el promedio de casi 32 toneladas.
En cuanto al detalle de lo registrado en la zona centro-norte de nuestra provincia, que incluye 11 departamentos y entre ellos Castellanos, del cual Rafaela es la cabecera, fueron difundidos por el Sistema de Estimaciones Agrícolas, elaborado por la Bolsa de Comercio de Santa Fe y el Ministerio de la Producción provincial, publicado por este Diario la semana anterior, desarrollando con mayor amplitud todo lo relacionado con las estadísticas de nuestra zona más cercana.
Es importante entonces repasar los buenos resultados obtenidos por la soja, considerando las dificultades surgidas por los efectos perjudiciales que tuvieron las intensas precipitaciones de fines de diciembre y comienzos de enero, contrarrestando lo negativo de la situación de la producción de leche. Es que, pese a los contratiempos que suelen presentarse en los ciclos agropecuarios, aunque en este caso por la desidia que hubo en la realización de obras que permitieron evitar, o bien reducir, las consecuencias de la acumulación de grandes masas hídricas como las hubo en grandes extensiones de la provincia.
En esta región centro-norte en la siembra de primera se cultivaron 880.000 hectáreas, siendo cosechadas 810.500, que significaron 2.877.294 toneladas, con un rinde promedio de 35,5 quintales por hectárea. De ese total el departamento Castellanos explicó 226.900 hectáreas sembradas y 205.500 cosechadas con un total de 760.350 toneladas y promedio de 37 quintales, 1,1 por encima del promedio. En la siembra de segunda el total de la región cultivado fue de 515.000 hectáreas y 464.000 cosechadas, con un total de 1.299.498 toneladas y rinde promedio de 28 quintales. En el caso Castellanos sembró 72.350 hectáreas y cosechó 51.400 de ellas, recolectando 143.920 toneladas y un rinde de 28 quintales, igual al promedio general.
De tal modo llegamos entonces a las 904.270 toneladas, sumando ambas siembras, que fue el aporte de los diversos distritos del departamento Castellanos al total de la región centro-norte santafesino, que además integran Vera, General Obligado, Nueve de Julio, San Javier, San Justo, Garay, Las Colonias, La Capital, San Martín y San Jerónimo.
Un tema que nos ha venido preocupando desde siempre, y ahora reiteramos, es que los importantes aportes que salen desde la Provincia hacia la Nación, y consecuentemente desde esta región a las arcas provinciales, no son debidamente compensados cuando de recibir fondos se trata.
En tal sentido, debe recordarse que la Nación reparte lo recaudado por derechos de exportación al complejo sojero a través del Fondo Federal Solidario. Específicamente, el 30% de los ingresos por este concepto son distribuidos entre las provincias bajo los mismos parámetros de la coparticipación federal de impuestos, por lo cual existe una disparidad enorme en la distribución con relación a los aportes, más allá de la denominación "solidaria" de la recaudación. Tomando antecedentes de años recientes, Santa Fe recibió muy poco más del 5% de sus aportes provenientes de la producción de soja.
Lo que debe buscarse, es un sistema de reparto que, sin dejar de ser solidario, sea más equitativo para con aquellas provincias que hacen los aportes más significativos, como es el caso de Santa Fe.