Dando curso a labores iniciadas posterior a un robo, del que resultó damnificada una rafaelina el 15 de febrero del presente año, personal de la Policía de Investigaciones estableció que el teléfono celular en cuestión, estaba siendo utilizado por una persona identificada como Tomas Nahuel Q.

En consecuencia, se realizó una requisa domiciliaria en la calle Gálvez, y el resultado fue negativo en cuanto al hallazgo del elemento antes descripto.

Sin embargo, la persona de mención manifestó que semanas atrás había vendido el celular a Nanci A., de 22 años de edad, por la suma de 12.000 pesos.

Así las cosas, se concretó un acto similar al anteriormente señalado en la nota, en este caso en una finca sita en la calle Zurbriggen, donde se ubicó el aparato comunicación sustraído en febrero pasado, por lo que se contabilizó el secuestro.

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