BUENOS AIRES / LYON, 31 (AFP-NA). - El canciller Héctor Timerman
se reunió ayer en Francia con el secretario general de Interpol, Richard K.
Noble, quien le expresó el apoyo al memorándum de entendimiento para avanzar en
la investigación del atentado a la AMIA, luego de la dura acusación del fiscal
Alberto Nisman contra el país islámico en el marco de la causa judicial.
Interpol señaló que "un número de ciudadanos iraníes sigue siendo objeto de
notificaciones rojas", mientras que el canciller "dijo que la
Argentina había cumplido con todas las obligaciones contenidas en el memorándum
de entendimiento y que el Gobierno espera continuar la cooperación con la
República Islámica de Irán para la resolución del caso".
Así lo informó la
Cancillería en un comunicado, en el que también reprodujo un documento de la
propia Interpol sobre el encuentro entre ambos funcionarios, realizado en Lyon.
Con respecto a los pedidos de captura con notificación roja para funcionarios y
exfuncionarios iraníes acusados por la Justicia argentina de participar directa
e indirectamente del atentado a la AMIA, Noble reafirmó la posición de la carta
dirigida a Timerman el 15 de marzo pasado, en el sentido de que el acuerdo con
Irán "no implica ningún cambio en el estado de las alertas rojas".
Tras el encuentro con Noble, Timerman afirmó que el memorándum de entendimiento
con Irán "sigue en pie", pese al dictamen que emitió el miércoles el
fiscal especial de la causa, Nisman, que acusó al país islámico de infiltrar
células terroristas en Sudamérica.
Timerman ratificó que "el memorándum es
el camino para resolver la causa" sobre el ataque a la sede de la mutual
judía, perpetrado en 1994 e informó que las autoridades de Interpol también
"consultaron sobre el nuevo dictamen del fiscal". "El canciller
argentino dijo que cuantos más elementos se aporten a la causa, más contundente
será el interrogatorio del juez (Rodolfo Canicoba Corral) a los acusados
durante la audiencia judicial (en Teherán) prevista en el memorándum",
informó la Cancillería.
Y agregó que Timerman "expresó el inequívoco
compromiso argentino con la vía judicial para encontrar y castigar a quienes
cometieron el peor atentado terrorista dentro de la República Argentina".
ACUSACION
DE NISMAN
Nisman emitió este miércoles un dictamen de 500 fojas en el que acusó a Irán de
infiltrar estaciones de inteligencia en varios países de Sudamérica
"destinadas a cometer, fomentar y patrocinar actos terroristas", y lo
entregó al juez Canicoba Corral.
El fiscal señaló al respecto este jueves que
no se va a "callar" y va a "ir por todo" en la
investigación "para poder seguir mirando a los ojos a los familiares del
atentado". En declaraciones a varios medios de prensa, el fiscal señaló
que de Irán "se ha escuchado hasta las cosas más estrafalarias" y que
"uno nunca sabe qué es lo que puede pasar", ya que se trata de
"un régimen terrorista que exporta el terrorismo a otras partes del
mundo", que "exporta una visión radical del Islam utilizando la
extrema violencia".
"Hay mecánicas de operatoria que funcionan igual
en América Latina y que son planificados por Irán. En nuestro país pasaron
determinadas circunstancias que llaman la atención. Luego de eso, se dio el
atentado de la AMIA", aseguró el fiscal, que ya recibió el respaldo de las
autoridades de la AMIA y la DAIA.
En su dictamen, el fiscal puso especial énfasis en
el papel que tuvo Mohsen Rabbani (agregado cultural de la embajada de Irán en
la Argentina en el momento del atentado) no sólo en el acto terrorista de la
AMIA sino como "coordinador de la penetración iraní en Sudamérica y muy
especialmente en Guyana, a través de su discípulo Abdul Kadir, máximo referente
iraní en dicho país", por lo que exigió en su escrito que Interpol extreme las medidas sobre los acusados.
Las dos cámaras del Congreso argentino
aprobaron en febrero de este año el memorándum con Irán, pero el parlamento
iraní no hizo lo propio y, al parecer, sólo obtuvo la aprobación por parte del
presidente, Mahmoud Ahmadinejad, lo que causó un profundo malestar entre
dirigentes de entidades judías y en el propio Gobierno.
Sin embargo, como la
información provino de un diplomático iraní de segunda línea -el encargado de
negocios de Irán en Buenos Aires, Ali Pakdaman-, la Casa Rosada no la consideró
oficial y Timerman ratificó que el Gobierno "aguarda que la contraparte
iraní comunique lo propio".