Editorial

Adiós a un grande

Sus restos acaban de ser sepultados, significa el punto final de una persona. Y así lo es físicamente, pero en el caso de Nicolás (Pipo) Mancera, es apenas el comienzo de su traslado a quedar definitivamente incorporado a la historia grande, la realmente valiosa y trascendente, del espectáculo nacional, pues ahí hay que incorporarlo. Fue un creador incomparable, maestro de maestros en lo suyo, al punto que hoy, muchas décadas después de sus famosos Sábados Circulares, de allí continúan nutriéndose muchas ideas y proyectos. Para muchos, Pipo Mancera fue el inicio de todo en la televisión.

Su fallecimiento se produjo por un fallo cardiorrespiratorio en Buenos Aires -su lugar de nacimiento el 20 de diciembre de 1930- próximo a cumplir 81 años, con un estado de salud que se había venido deteriorando notoriamente en los últimos tiempos. 

Sus comienzos fueron en el periodismo escrito, en revistas y diarios, especializado en cine, lo cual fue su gran pasión de juventud, ya que solía recordar que en su adolescencia y juventud solía ver hasta tres películas por día, y los fines de semana se recorría varias salas, con hasta una docena de filmes acumulados. Fue un agudo crítico, muy respetado, moldeando allí lo que sería con posterioridad, un verdadero showman de la TV, reconocido como el más ingenioso, creativo y valiente que haya existido en la pantalla chica, con muchísimo mayor mérito pues lo suyo fue en épocas en que todo se hacía en directo, sin la posibilidad de videos o filmaciones. Correr de un lado a otro, era parte del trabajo de entonces, que aún así fue de un valor incomparable, siempre reconocido, y ahora que Pipo Mancera ya está en la historia, tal como un mito, muchísimo más todavía.

Para marcar su impronta, tal vez alcance y sobre con recordar dos hechos. Es que en su programa fue el descubridor de Sandro -luego una de las leyendas de las figuras populares, rescatándolo del grupo Sandro y los de Fuego para ubicarlo como solista-, y de Diego Maradona, a quien entrevistó por primera vez en la TV cuando apenas tenía 8 años y nadie suponía lo que "el 10" llegaría a ser. Una anécdota que se recuerda de aquella entrevista, cuando en la TV no existía el recurso del corte ni del reemplazo de lo que se estaba haciendo, al concluir la charla con Diego debía presentarse otra figura, que se demoró unos 5 minutos en llegar. ¿Saben cómo se cubrió el bache?, pues con Maradona haciendo jueguito con una pelota, sin que cayera una sola vez al piso, dando un claro indicativo de lo que llegaría a ser en el futuro como futbolista. Y Pipo lo había anticipado, presentando por primera vez a Maradona ante el gran público.

El ingreso a la TV de Mancera fue en 1954 como parte del programa Pantalla Gigante, pero desde ahí comenzó a insistir con la idea de contar con un programa propio de varias horas de extensión, consiguiendo inicialmente uno de una hora, que no era poco para la época en que la mayoría de los programas no iban más allá de los 30 minutos. Al fin en 1962 alcanzó lo que quería con un programa de 5 horas de duración, aunque en el mismo se le exigía incluir una película, para hacerlo "más llevadero" le advirtieron las autoridades de Canal 9.

Tal como suele acontecer en la TV de nuestros días, Sábados Circulares de Mancera pasó luego de varios años a Canal 13 y allí tuvo sí la extensión que él pretendía: 8 horas. Fue un éxito singular, de tan sobresalientes características, que llegó a alcanzar más de 80 puntos de rating, algo impensado en este tiempo, cuando los 40 puntos que a veces suele rozar el programa de Marcelo Tinelli son considerados excepcionales. Ante la mención, digamos que el conductor de Show Match, en sus palabras de despedida a Mancera antes de iniciar su programa del lunes, reconoció haber admirado y aprendido de Mancera. No son pocos quienes, por trayectoria y similitudes, hoy los comparan.

Pipo no fue sólo un entrevistador, sino un showman completo, como aquella vez en 1971 que se sumergió en una caja de hierro en el Río de la Plata, atado de pies y manos, emulando al gran Houdini. Estrellas mundiales de entonces como Marcelo Mastroiani, Alain Delon, Anita Ekberg, Gina Lollobrígida, Raphael, Joan Manuel Serrat, Sofía Loren pasaron por su programa, cuyo reconocimiento hacía rato que había superado las fronteras del país para proyectarse al mundo.

En 1996 Pipo Mancera recibió el premio Martín Fierro en reconocimiento a su trayectoria. Fue inmensa.

 

Autor: Redacción

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