Internacionales

Acuerdan cambiar los estatutos de la UE

ESTRASBURGO, FRANCIA, 25 (AFP-NA). - Alemania se salió ayer con la suya en su oposición a implicar más al Banco Central Europeo (BCE) frente a la crisis de la deuda, en una cumbre con Francia e Italia que dejó frías a las bolsas y fue seguida de un alza de las tasas de las obligaciones italianas.

Francia y Alemania "harán propuestas en los próximos días para modificar tratados" de la Unión Europea (UE) y para "mejorar la gobernanza de la zona euro y la convergencia de las políticas económicas", anunció el presidente Nicolas Sarkozy al término de la minicumbre celebrada en Estrasburgo con los jefes de Gobierno de Alemania, Angela Merkel, y de Italia, Mario Monti.

La modificación de los tratados era una de las exigencias de Alemania para reforzar la disciplina presupuestaria de los 17 Estados de la zona euro y frenar el contagio de la crisis de la deuda que ya obligó a rescatar a Irlanda, Portugal y Grecia y amenaza a otros países, empezando por Italia y España.

Ese punto y el papel BCE que Francia insiste en ampliar, son los dos asuntos más polémicos entre los dos países vecinos, motores de la construcción europea. Pero en esta minicumbre, que había levantado fuertes expectativas, la canciller alemana mantuvo su posición.

Como "el presidente francés acaba de subrayar, el BCE es independiente y por lo tanto, eventuales modificaciones del tratado (de Lisboa) no conciernen al BCE que se ocupa de política monetaria y de estabilidad monetaria", sostuvo.

Alemania rechaza que el BCE intervenga de forma masiva en el mercado de la deuda. Francia estima en cambio que debería desempeñar un "papel esencial" en la solución de la crisis, por ejemplo comprando grandes cantidades de deuda a los países más frágiles.

Autor: Redacción

Estás navegando la versión AMP

Leé la nota completa en la web