La conducción del futuro sólo puede ser así: eficiente e inteligente. La calle, que ejerce de test infalible, muestra que un nuevo modelo energético en la automoción no solo es posible sino que ya es una realidad. Y además de sostenible, es 100% disfrutable. El I-PACE, el primer eléctrico 100% de Jaguar, llega al mercado combinando un apasionante aspecto y una conducción con conciencia para aquellos que saben que la revolución es una cuestión de instinto (y de supervivencia).
Los coches eléctricos están liderando la verdadera revolución verde. Todos los indicadores constatan que, lejos de ser una apuesta de futuro, son la gran alternativa del presente. Emisiones, ahorro, autonomía… El I-PACE de Jaguar es la demostración perfecta de que el futuro es eléctrico –y en su caso, imponente-. Este SUV de alta gama combina todas las ventajas de un cero emisiones 100% recargable. Razones de peso que han hecho posible que esta opción gane cada vez más adeptos.
Pero es que con el nuevo I-PACE no solo tendremos un eléctrico, sino algo más allá: un súper coche de 400CV que va de cero a 100 en 4 segundos y cuyo elegante diseño nos elevará a otra categoría. La oportunidad de tener un gran coche que además es sostenible con el medio ambiente. Pero... ¿por qué invertir ahora en un eléctrico?
Reducir la huella de CO2 es una tarea que nos concierne a todos. El vehículo eléctrico es, de hecho, el camino más corto para cumplir con los objetivos de reducción de las emisiones requeridas por la UE para 2020. Como el I-PACE, que no solo no contamina el aire sino que, alimentado con fuentes de energía renovables, es la única apuesta para la salud de los que vienen detrás. Un acto de responsabilidad global que determinará el desarrollo económico y social de la sociedad de futuro.
El nuevo icono de modernidad y conciencia del panorama musical es Dua Lipa. La joven de 23 años ha protagonizado uno de esos ascensos de infarto. Sofisticada, vanguardista, potente y sensible. Los adjetivos que la describen se elevan como una bandera de empoderamiento y tecnología pero sobre todo de personalidad. Solo ella podría dar forma a ‘Want to’, el tema que la cantante ha versionado para I-PACE utilizando los datos recogidos tras analizar su forma de conducir y que, gracias al software de Jaguar sus fans podrán versionar utilizando datos como las canciones que más escuchan o tocando un ritmo en su dispositivo móvil.
La falta de puntos de recarga es el mantra más repetido entre los incrédulos. Nada más lejos de la realidad. Primero, porque solo el 5% de las veces se utilizan los puntos de recarga públicos. Es decir, la gran mayoría carga en su casa o en el trabajo. Y, en segundo lugar, porque se prevé que en tan solo dos años exista en Europa una red de 220.000 cargadores. Es decir, un cargador por cada 34 km de autopista. Pero es que además, en el caso del I-PACE la carga completa proporciona una autonomía de hasta 470 km.
Los propietarios del I-PACE pueden aprovechar las ventajas económicas que ofrece un vehículo eléctrico. Una inversión importante que, a la larga, es altamente rentable. Subvenciones, bonificaciones en impuestos, reducciones en el pago de parquímetros y peajes y libre acceso a carriles para vehículos de alta ocupación. La suma de todos ellos puede suponer un punto de inflexión en la balanza pues en carretera no es más rico el que más tiene, sino el que más ahorra.
El eléctrico ya te permite tener más en menos. En el caso del I-PACE, la batería de 90 kWh consta de celdas de ion litio de alta densidad energética. Gracias a su diseño y sus modernos sistemas de gestión térmica garantiza una larga vida útil y ofrece periodos prolongados de potencia máxima constante. Con un cargador rápido como el que se encuentra en la mayoría de las estaciones de carga públicas de corriente continua, el I-PACE puede alcanzar hasta 270 km de autonomía por hora.
El nuevo Jaguar I-PACE, como todos los Jaguar, ofrece una sensación inimitable al conducirlo en carretera. Un espíritu indomable que, por primera vez, gracias a los motores eléctricos y su distribución del peso ofrecen 696 Nm de par instantáneo y la agilidad propia de un deportivo. En efecto, el I-PACE es ante todo un Jaguar: un vehículo para los amantes de la conducción que, eso sí, ya es posible conducir sin renunciar al respeto por el medio ambiente.